"Y, sobre todo, leíamos, leíamos todo lo que nos caía en las manos. Sacábamos libros de todas las bibliotecas públicas y, unos a otros, nos dejábamos prestados los hallazgos que conseguíamos encontrar. Pero la mejor academia, el lugar donde mejor se informaba uno de todas las novedades, era el café".
«El mundo de ayer. Memorias de un europeo». Stefan Zweig.
________________________________________________________________________________________________

martes, 11 de junio de 2013

EL FUERTE, de Bernard Cornwell

Cornwell vuelve a decidirse por los mosquetes y los cañones; y con gran éxito, ya que este libro, a mi parecer, le sale redondo. Una historia interesante y bien contada, como él sabe hacerlo.
La acción se sitúa en plena guerra de la independencia de las colonias británicas de Norteamérica. 
Los independentistas norteamericanos de Massachusetts emprenden en 1779  la Expedición de Penobscot, formada por milicias, infantería de marina y una numerosa flota, con la que pretenden “capturar, matar o destruir” a las fuerzas de “casacas rojas” invasoras que han ocupado la aldea de Majabigwaduce, con el fin de establecer una posición estratégica.
A este episodio de la história,  se le conoce como “el peor desastre naval que jamás sufrió Estados Unidos antes de Pearl Harbor”; aunque hay que aclarar que este asunto fue un asedio.
El autor consigue darnos una visión de lo más fiel de lo que fue este episodio. Y lo hace con su estilo inconfundible que engancha y enamora. A su excelencia en las escenas de guerra, le añade en esta ocasión un tratamiento psicológico, minucioso e inteligente de los hechos, combinados con un bien medido uso de los recursos de la ficción.
Se trata de una obra coral, en la que no hay un protagonista o protagonistas centrales, lo que le da a la narración una gran riqueza. A esta riqueza contribuye grandemente, lo bien dibujados que están todos los personajes. Personajes, la mayoría de los cuales son reales, como por ejemplo: Paul Revere, que aquí aparece desmitificado, el teniente John Moore, en sus inicios o el Brigadier General Francis McLean, arquetipo del buen militar profesional.
La situación y evolución estratégica del conflicto y los detalles tácticos aparecen muy bien definidos por Cornwell, dándole un empaque perfecto a la narración.
Las notas históricas que aparecen al final son ”imperdibles”; de gran valor e interés.
En definitiva, una muy buena novela histórica de aventuras que enseña deleitando; que es lo que yo le pido a la novela histórica.


Un saludo

2 comentarios:

  1. En algún lugar leí declaraciones de Cornwell en las que decía que su escritura estaba influenciada por la fantasía, la ciencia ficción y la historia y creo que lo que ha logrado en muchas de sus novelas es una simbiosis bastante acabada de todas esas cosas (algo nada sencillo) que hace que sus libros resulten muy entretenidos.

    ResponderEliminar