"Y, sobre todo, leíamos, leíamos todo lo que nos caía en las manos. Sacábamos libros de todas las bibliotecas públicas y, unos a otros, nos dejábamos prestados los hallazgos que conseguíamos encontrar. Pero la mejor academia, el lugar donde mejor se informaba uno de todas las novedades, era el café".
«El mundo de ayer. Memorias de un europeo». Stefan Zweig.
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viernes, 9 de agosto de 2013

LA BATALLA DE SALAMINA, de Barry Strauss

El mayor combate naval de la antigüedad, reza el subtítulo. Y también uno de los más decisivos para la historia posterior de Occidente. Este es uno de los temas de debate clásicos en los foros de historia; y sin entrar en este debate, ya que da para mucho, y además no soy un especialista en el tema, si diré que la lectura de este libro me parece imprescindible para entender, no solo el conflicto en si, sino también la época en que se encuadran los hechos (480 a.C. Guerras Médicas). Strauss no se limita a lo que es la batalla propiamente dicha; ni se limita tampoco a analizar las causas del conflicto y sus consecuencias, sino que hace un amplio despliegue de información siempre en un estilo ameno y entretenido. Analiza la situación socio-política del momento en Grecia, la costa mediterránea de Anatolia y Persia. Nos habla de las costumbres de unos y otros; religión, ritos, formas de vestir, de alimentarse, formas de encarar los problemas, escalas de valores, psicología del pueblo y de los gobernantes, etc; todo ello, naturalmente, dentro del estado de guerra en que se vive. Disecciona profusamente todo lo referente a los trirremes, las naves de guerra de la época. En este aspecto, una de las cosas que me ha gustado del libro es que nos habla de estrategia y táctica naval. No olvida hablar de la geografía y el clima, decisivos en este conflicto. Aparecen bastantes mapas. Y como no, nos habla de los grandes protagonistas de esta episodio histórico: Temístocles, el gran hacedor de la flota ateniense, la mas numerosa de la alianza griega. Mucho nos tendríamos que extender sobre esta genial y controvertida figura histórica, ya que Strauss lo convierte en uno de los puntales de este magnífico ensayo, como no puede ser de otra manera, dada su condición de líder incomprendido, inteligente y decisivo en grado sumo.
Temístocles
Jerjes, el emperador persa, llamado "El Gran Rey", el rey de reyes, otro puntal de este ensayo, siguiendo la linea de profusa información apuntada antes. Euribíades, general espartano, convertido en almirante de la flota griega para la ocasión. Artemisia, reina de Halicarnaso y aliada de Jerjes; mujer de armas tomar, nunca mejor dicho; personaje interesante y atractivamente novelesco como pocos. Cito solamente estos, que me parecen los principales, aunque hay muchos más. Las fuentes que le sirven a Strauss de punto de partida son principalmente tres: Herodoto, como no; Esquilo, el poeta y dramaturgo trágico que participo en la batalla; y el historiador Plutarco. No deja de advertir, tanto los aciertos como los posibles errores de los tres. Y hablando de errores, hay uno de bulto del autor: Dice que la democracia ateniense data de 250 años antes de Salamina, cuando en verdad son solo 28 años, ya que en el 508 a. C. las reformas de Clístenes dan lugar al nacimiento de la democracia ateniense.
En su ensayo, Strauss utiliza un cierto aire de novela, que le da a la narración la amenidad y capacidad de entretenimiento apuntada más arriba. Esto supone cierta especulación, pero el autor lo argumenta todo de tal modo que le hace salir airoso de la apuesta. La obra, desde luego, está orientada al gran público.
Resumiendo: Interesante y minucioso ensayo histórico que además de acercarnos "el mayor combate naval de la antigüedad", nos acerca "lo griego".... y también "lo persa". Gran libro que a mi me ha servido para familiarizarme un poco más con el mundo y el espíritu de la Grecia antigua. Humildemente lo recomiendo.

Un saludo.

sábado, 3 de agosto de 2013

ANOTACIONES 1990

Poniendo un poco de orden en mi guarida, me he encontrado con un libro/agenda del año 1990 que en su día decidí usar exclusivamente para mis anotaciones sobre libros. Casi nada; no ha llovido sabes. Encontrar escritos propios de hace tanto tiempo me produce una sensación de vértigo de la que me cuesta sobreponerme durante un buen rato. Los recuerdos, caen sobre uno en tromba, como un ejercito dispuesto a ajustar cuentas cruelmente y sin darte cuartel; porque claro, cuando ocurre esto, yo al menos soy incapaz de volver a guardar lo encontrado sin darle un vistazo. Me quedo paralizado y el ejercito de los recuerdos me arrolla. Este libro/agenda redescubierto, como se puede ver en la foto es una auténtica belleza de Olañeta Editor sobre el mundo del indio piel roja, en el que encontramos una colección escogida de fotos,dibujos, poemas y escritos que evocan el espíritu de esta gran raza. Se editaron tan solo 2500 ejemplares de tamaño 27x19 numerados del 1 al 2500, y este es el número: 212.
Abro el libro y empiezo a leer las anotaciones que hice en aquellos ya lejanos días del siglo XX. Anotaciones de libros que aun no he leído: El americano impasible, de Graham Green; Bajo las ruedas, de Hermann Hesse; El espía que surgió del frío, de John Le Carre; El ángel subterráneo, de kerouac; Cuentos de Canterbury, de Chaucer; El Golem, de Gustav Meyrink; Los sauces, de Algernon Blackwood, y algunos más. Anotaciones de libros que si he leído: El hombre ilustrado, de Ray Bradbury; Otra vuelta de tuerca, de Henry James; El increíble hombre menguante, de Richard Matheson; Analectas, de Confucio; El arpa de hierba, de Truman Capote; El corazón es un cazador solitario, de Carson McCullers,  y un largo etcétera. También hay listas de autores sin nombrar ninguno de sus libros: John Fante, Faulkner, Nathaniel Hawtorne, Walter De La Mare, Wells, Tom Wolfe, Pío Baroja, Ovidio... 
Una nota que me trae recuerdos muy especiales: -Knut Pedersen Hamsun, novelista noruego (1859-1952), premio novel 1920. Pan, Soñadores, Hambre-.
Fragmentos de lecturas, como esta de la novela El Pirata, de Joseph Conrad: "Embarcación majestuosa pero de lo más taciturna; como todas las cosas majestuosas suelen serlo."
Encuentro también direcciones de librerías de todo tipo, notas sobre editoriales, colecciones, precios. En fin, vestigios de tiempos pasados y de unas inquietudes que afortunadamente aun conservo. En realidad no ha cambiado nada; simplemente que ahora uso un bloc pequeño para mis anotaciones libreras. Me doy cuenta de la cantidad de libros anotados que aun no he leído, y de otros que me gustaría releer. Vértigo, mucho vértigo.